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No existen espacios habilitados para fumar eficaces para evitar los efectos del humo sobre la salud

Las propuestas lanzadas por los hosteleros para sacar la reforma de la Ley Antitabaco adelante han provocado una reacción inmediata en los representantes de la profesión médica asistentes a la Comisión de Sanidad donde ayer se escucharon distintas comparecencias. Además de las de sindicatos como UGT y CCOO y la de la Federación Española de Hostelería, también tuvo oportunidad de expresarse el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo, al que pertenece la OMC y cuyo presidente, el doctor Rodríguez Sendín, asistió junto a la presidenta del CNPT, la doctora Ángeles Planchuelo al desarrollo de la sesión

Madrid, 24 de septiembre 2010 (medicosypacientes.com)

Los doctores Rodríguez Sen-
dín y Planchuelo, a la salida
de la Comisión de Sanidad
del Congreso.

Los presidentes de la Organización Médica Colegial (OMC) y del Comité Nacional Para la Prevención del Tabaquismo (CNPT), el doctor Rodríguez Sendín y la doctora Mª Angeles Planchuelo, respectivamente, mostraron ayer su rechazo a las propuestas efectuadas por la Federación Española de Hostelería (FEHR) durante su comparecencia ante la Comisión de Sanidad y Política Social en relación con la Proposición de Ley para la reforma de la Ley Antitabaco de 2005. Ambos han coincidido en señalar que no se puede poner precio a 3.000 muertos anuales que involuntariamente fallecen a consecuencia del tabaco, al tiempo que han esgrimido ?que no existe ningún espacio habilitado para fumar que sea eficaz para evitar la difusión de las sustancias dañinas del humo del tabaco en el resto del local?.

Cinco fueron las propuestas lanzadas por el presidente de la FEHR:
1-En los establecimientos de hostelería que lo deseen se instalarán zonas para fumar cerradas y compartimentadas en la que no será obligatorio ningún tipo de servicio por parte de los trabajadores, estando prohibida la entrada a los menores. Estas zonas tendrían una limitación del 30 por ciento de la superficie del local, y en los establecimientos en los que no existieran estas zonas estaría totalmente prohibido fumar.
2-Adecuar técnicamente las instalaciones de extracción de estas zonas para fumar de forma que se consiga una perfecta aireación de las mismas.
3-Creación de una línea de crédito, ?plan renove?, dirigido a financiar específicamente las inversiones de implementación de estas zonas para fumar y de renovación de las instalaciones de extracción de humos y olores de los establecimientos de hostelería.
4-Aprobar un período de carencia de 18 meses para que las empresas hosteleras pudieran efectuar las obras de adecuación en sus establecimientos de las zonas para fumar.
5-Retirar de la actual ley todas las referencias que se refieran a la responsabilidad del empresario, especialmente, como responsable de las posibles infracciones cometidas por los clientes.

Una vez escuchadas dichas medidas por los doctores Rodríguez Sendín y Planchuelo, el presidente de la OMC dijo llamarle la atención “que sean los propios empresarios de hostelería los que hagan este tipo de propuestas”. En su opinión, “no han evaluado, detenidamente, las consecuencias que podría a carrear este tipo de medidas a los locales pequeños. Permitir que se habiliten zonas para fumadores en los bares sería discriminatorio para los propios hosteleros, porque los pequeños, que son la mayoría, no podrían abrir estos espacios, quedando en desventaja con respecto a los de mayor tamaño”. “De tal forma, -como añadió- unos tendrían disponibilidad para habilitar esos espacios y obtendrían ventaja competitiva de cara al mercado mientras otros perderían al no poder tenerlo”. A juicio del doctor Rodríguez Sendín, ello sería negativo para el desarrollo de la Ley del Tabaco, y, desde el punto sanitario -como señaló- “no se puede admitir”.

Por su parte, la doctora Planchuelo manifestó que ante el humo del tabaco “no existe ningún tipo de seguridad para la población”, por tanto, puntualizó, “no es cuestión de que a menor concentración, menos riesgo, y a más concentración más riesgo, puesto que hay evidencia de que desde las primeras exposiciones dicho riesgo de alteraciones en el organismo existe”.

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