Además, y según su presidente, el doctor Sánchez Luque, ?la Sanidad andaluza carece, hoy por hoy, de medios que garanticen una correcta aplicación de la Ley?
Málaga, 11 de septiembre 2008 (Redacción)
La Ley de Derechos y Garantías de la Dignidad de la Persona en el Proceso de la Muerte, impulsada por la Junta de Andalucía, necesita una ?transformación importante? y tiene ?muchos puntos confusos?, en opinión del Colegio de Médicos de Málaga. Según indicó el presidente de la institución colegial, el doctor Juan José Sánchez Luque, en rueda de prensa, ?el tema más destacable radica en que la sanidad andaluza carece hoy por hoy de medios que garanticen una correcta aplicación de la Ley de Muerte Digna?.
Por su parte, el vicepresidente tercero del Commálaga y jefe de la Sección de la Unidad del Dolor del Hospital Clínico, doctor Francisco Linares, afirmó que los hospitales andaluces no apuestan actualmente por las unidades del dolor y cuidados paliativos. Como ejemplo, citó su propio caso ya que es el único médico fijo que trabaja dentro de la Unidad.
Se da la paradoja de que, tal y como mencionó el presidente de la Comisión Deontológica del Colegio de Médicos, el doctor Joaquín Fernández-Crehuet, la Ley de Muerte Digna contempla que proporcionará a los ciudadanos ?cuidados paliativos integrales de alta calidad?. Según el doctor Linares, esto es ?imposible con los medios humanos y técnicos actuales? e instó a la Administración a que ?deje de parchear y dote de medios a los hospitales y a los centros de salud para crear una red real dirigida a los enfermos terminales y a sus familias?.
Principales discrepancias
Los dos puntos principales con los que discrepa el Colegio de Médicos de Málaga, tal como se apuntó, son el establecimiento de infracciones de hasta un millón de euros, a abonar por el médico sancionado en el que caso de que no quiera -por motivos de ciencia o de conciencia- aplicar la Ley y que el texto no proporciona la posibilidad de acogerse a la objeción de conciencia. El coordinador de la Asesoría Jurídica del Colegio, el letrado José Enrique Peña, calificó de ?desmesurado e innecesario? el sistema de infracciones para los médicos porque ?la Administración da por hecho que el profesional va a fallar?.
En esta línea, el presidente de la Comisión Deontológica, Dr. Fernández-Crehuet, insistió en que los facultativos se rigen por los protocolos vigentes a la hora de tratar a enfermos terminales, que son los que recomiendan qué hacer y qué no: ?Estos protocolos se aplican a diario y de manera ejemplar en los hospitales españoles y no generan ningún conflicto ni con los enfermos ni con sus familiares?.
Como el anteproyecto tiene un plazo de dos años para adaptar la Ley a la realidad, el presidente de la institución, dijo que la Junta de Andalucía tendrá que hacer un ?importante esfuerzo? y recordó el caso de Cudeca (Cuidados del Cáncer), organización que se encuentra con verdaderas dificultades para mantener su unidad de ingresos en cuidados paliativos para enfermos terminales.
El doctor Sánchez Luque anunció, además, que el Consejo Andaluz de Colegios de Médicos presentará una serie de alegaciones y enmiendas al anteproyecto.
