El Colegio de Médicos de Cantabria condena de forma enérgica una nueva agresión a una colegiada que se suma a las ocho que se han registrado a lo largo de este año. En esta ocasión, ocurrió el 4 de agosto en el Centro de Salud de Selaya, contra una médico de familia que recibió amenazas de muerte cuando atendía a un paciente por teléfono.
La Guardia Civil de Cantabria, dentro del Plan Integral de protección a los profesionales de la salud, está investigando al presunto autor de la agresión por un delito de amenazas a funcionario público.
La médico fue agredida verbalmente cuando se encontraba en su puesto de trabajo pasando consulta telefónica en el momento en que un paciente le solicitó que le derivara a un especialista por un problema de salud y la colegiada le informó que primero le tenía que hacer unas pruebas en el consultorio, momento en que el paciente comenzó a gritar y a insultarla, al tiempo que la amenazó de muerte.
El Colegio de Médicos de Cantabria insiste en la necesidad de denunciar cualquier tipo de agresión y recuerda a todos los colegiados que el Interlocutor Policial Sanitario de la Guardia Civil está desarrollando un plan integral para la seguridad de los profesionales de la salud con actuaciones dirigidas a incrementar la seguridad de los centros de salud y de su personal, manteniendo canales de comunicación ágiles para el intercambio de información y prestando los auxilios que se precisen a través del teléfono 062.
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