La Asamblea del Colegio de Médicos de Alicante, celebrada el pasado lunes, se saldó con un absoluto rechazo a las restricciones económicas y al cambio de las condiciones laborales de los profesionales médicos, en línea con los posicionamientos de otros Colegios de Médicos. Según expresó el presidente de la entidad colegial alicantina, el doctor Antonio Arroyo, “los médicos, obligados por nuestra profesionalidad y código deontológico, no podemos aceptar ninguna instrucción ni medida legal que conlleve la más leve pérdida de calidad de nuestro sistema sanitario o pueda poner en peligro la salud de nuestros pacientes”
Alicante, 25 de enero 2012 (medicosypacientes.com)
La Asamblea del Colegio de Médicos de Alicante, celebrada el pasado lunes, se saldó con un absoluto rechazo a las restricciones económicas y al cambio de las condiciones laborales de los profesionales médicos. Según expresó el presidente de la entidad colegial alicantina, el doctor Antonio Arroyo, “los médicos, obligados por nuestra profesionalidad y código deontológico, no podemos aceptar ninguna instrucción ni medida legal que conlleve la más leve pérdida de calidad de nuestro sistema sanitario o pueda poner en peligro la salud de nuestros pacientes”.
Tras la reunión, que registró un alto índice de participación, se decidió trasladar al Consell, a los colegiados y a la sociedad en general, las medidas adoptadas por la entidad colegial entre las que cabe destacar: la exigencia de la paralización del decreto-ley; la denuncia de la injusticia que se ha realizado a los enfermos con Incapacidad Laboral Transitoria; la negociación con el Consejo Autonómico de Colegios de Médicos de las medidas que puedan afectar a la calidad asistencial; la creación de un grupo de seguimiento de la aplicación de dichas medidas; el apoyo a la manifestación de protesta convocada para mañana jueves en Alicante.
Durante la reunión informativa, el doctor Arroyo explicó a los asistentes en contenido de la entrevista celebrada, el pasado 12 de enero entre los Colegios de Alicante, Castellón y Valencia con el consejero de Sanidad, Luis Rosado, a quien expusieron las razones en el rechazo global de las medidas. “Se habló de falta de diálogo y comunicación ante la grave situación generada por las medidas por lo que la protesta está más que justificada. También se dijo que una vez más el gran sacrificado es el médico, que sufre un recorte de su salario con la reducción del 50% del capítulo carrera profesional. El ahorro económico es factible por otras vías, como la supresión de cargos y organismos poco necesarios. Tiene que haber equidad en el reparto de cargos frente a la crisis”.
Se subrayó que las medidas de reestructuración de los servicios médicos repercutirán negativamente en las nóminas que actualmente cobran los médicos “y lo que es más doloroso es la calidad de servicios al paciente, con la consiguiente alarma social. Los recortes es razonable pensar que unirán: más trabajo, riesgo sobre la calidad y alarma de la ciudadanía”, según expuso el presidente de Alicante.
Como propuestas de futuro se habló de mantener reuniones periódicas entre la Consejería y los Colegios de Médicos, informar al colegiado, y vigilar la repercusión asistencial de las medidas en cuanto a la calidad y que exista una compensación al sacrificio con estabilidad laboral.
