Una serie de Sociedades Científicas se han unido en contra del R.D. de la Consejería de Sanidad Valenciana que establece la selección de medicamentos mediante algoritmo de decisión terapéutica. Las entidades piden, en este sentido, que la prescripción informatizada no interfiera en la libertad de prescripción del médico
Valencia, 17 de mayo 2013 (medicosypacientes.com)
Sociedades Científicas como la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), la Sociedad Valenciana de Médicos Generales y de Familia (SEMG/Valencia), la Sociedad Valenciana de Cardiología (SVC), la Sociedad Valenciana de Endocrinología, Diabetes y Nutrición (Svedyn), la Sociedad Valenciana de Medicina Interna (SEMI-CV), la Sociedad Valenciana de Hipertensión y Riesgo Vascular (SVHTAyRV) y la Sociedad de Medicina Interna valenciana, se han unido contra el documento de la Conselleria de Sanidad de selección de medicamentos, conocido como algoritmo de decisión terapéutica. La Administración sanitaria valenciana anunció la propuesta de elaboración de algoritmos de decisión terapéutica corporativos mediante la publicación, el pasado mes de marzo del Decreto Ley 2/2013 de Actuaciones Urgentes de Gestión y Eficiencia en Prescripción Farmacéutica y Ortoprotésica.
Dichas entidades cosideran que la prescripción informatizada «no debe interferir en la libertad de prescripción del médico, tanto del primer nivel asistencial (médico de Atención Primaria), como del segundo nivel de medicina especializada hospitalaria», aunque no se oponen a que los citados algoritmos puedan ser una herramienta útil para el profesional.
Este grupo Sociedades Científicas lamenta que «no se hayan tenido en cuenta la mayoría de recomendaciones que plantearon los profesionales». Tras haber tenido acceso al documento de consenso, han manifestado «su preocupación ante un sistema de prescripción informatizada que puede suponer una burocratización excesiva y, según puntualizan, no está al servicio ni del paciente ni del médico, sino de criterios puramente economicistas, y no busca la mejorar de la salud o el pronóstico de los pacientes».
Asimismo, advierten que la implantación de los citados algoritmos de decisión terapéutica «no puede convertirse en un camino sin salidas alternativas para el profesional sanitario», ya que, según las sociedades científicas, «se debe respetar siempre la formación y criterio del profesional en el acto médico de cada paciente, y debe adaptarse a la características particulares de la patología y del individuo sobre el que se está interviniendo».
En esta línea, las Sociedades Científicas consideran que la formación adecuada del profesional «debe ser la herramienta más útil para la prescripción racional y la eficiencia del sistema», y que son ellos, los médicos, «los que aplican los criterios para una prescripción adecuada tanto en indicación y selección, como en términos costo-eficientes».
Además, han incidido en que este tipo de regulaciones para la prescripción «puede provocar diferencias en el acceso a ciertos tratamientos entre ciudadanos de diferentes comunidades autónomas, lo que puede romper el principio de equidad del Sistema Nacional de Salud».
En opinión de las mismas, si las administraciones sanitarias autonómicas buscan el consenso de los profesionales, «se debe modificar la rigidez y la obligatoriedad de cumplimiento de este primer algoritmo, que afecta a la prescripción de estatinas, y conseguir que sea realmente un instrumento de ayuda y no de limitación a la prescripción de fármacos previamente autorizados por la administración sanitaria».
Según las entidades, la unión de estas sociedades ante la decisión de la Conselleria de Sanidad «no tiene precedentes y pone de relieve la unidad y consenso de los profesionales de la salud en la Comunitat Valenciana».
