El Boletín "Europa al Día" del Departamento de Internacional del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM), recoge en su número 501, las prioridades de Portugal en la presidencia del Consejo de la Unión Europea, entre las que se encuentra, promover la recuperación de Europa, apalancada por el clima y las transiciones digitales
Portugal toma el relevo de Alemania en la cúpula de la Unión Europea desde este 1 de enero tan atípico, asume la Presidencia del Consejo en un momento sin predecentes, con los ciudadanos europeos todavía haciendo frente a los efectos de la pandemia de Covid-19. Su prioridad, por tanto, es la recuperación.
El primer ministro portugués, António Costa, presentó el programa de su presidencia el pasado 2 de diciembre en una rueda de prensa conjunta a distancia con el presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli.
Portugal está dispuesta a hacer frente al complicado panorama actual y trabajará por una Europa más resiliente, social, ecológica, digital y global. El lema para su presidencia es: «Tiempo de actuar: por una recuperación justa, verde y digital”.
En consecuencia, se trabajará en tres prioridades principales a través de varios ejes de acción:
– Promover la recuperación de Europa, apalancada por el clima y las transiciones digitales.
– Implementar el Pilar Social de la Unión Europea como elemento clave para garantizar un clima justo e inclusivo y una transición digital.
– Fortalecer la autonomía estratégica de Europa manteniéndola abierta al mundo.
La nueva presidencia tendrá que continuar trabajando en algunas de las prioridades del mandato anterior de Alemania. El futuro de las relaciones entre la UE y Reino Unido, el progreso en la acción climática, el presupuesto de la UE a largo plazo y el plan de recuperación centrarán su atención durante el primer semestre de 2021.
Portugal comienza su cuarta presidencia rotatoria del Consejo. El 1 de enero celebra los 35 años desde su adhesión a la Unión Europea, junto con España.
Nace así marcado por las consecuencias de la pandemia del coronavirus este semestre en manos de un país que ha ido de más a menos en su gestión de la devastadora crisis sanitaria. Pero el papel coordinador de esta Lusitania comandada por el socialista Antonio Costa, se centra en abrir las puertas a la esperanza gracias al acuerdo de distribución de la vacuna en los 27 países miembros de esta UE presta a encarar sus relaciones con el Reino Unido desde una perspectiva diferente tras dar carta de naturaleza al Brexit.
La estrategia de vacunación se alza, por tanto, como la gran prioridad en la agenda comunitaria que deberá impulsar Lisboa, de camino para lograr «la verdadera unión para la salud»,
Aplicar los criterios adecuados para que siga su curso el proceso que persigue la inmunización de los ciudadanos europeos pasa a ser un asunto de primer orden, si Europa desea ver la luz al final del túnel.
Comienza un nuevo ciclo, con los permisos pertinentes que ha de aprobar la Agencia Europea del Medicamento, el organismo que rechazó instalarse en Barcelona debido a la inestabilidad política catalana y que opera desde su sede central en Ámsterdam.
Si esa estrategia masiva de vacunación resulta satisfactoria, y tiene todas las condiciones para que lo sea, será un salto cualitativo en la manera en la que podemos responder a la crisis sanitaria y a las consecuencias económicas y sociales.
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