El profesor Vassilios Papalois, presidente de la European Union of Medical Specialists (UEMS), explica en esta entrevista su visión sobre el estado actual de la pandemia por COVID-19, los perjuicios que esta ha provocado en los médicos e instituciones europeas, su valoración del programa EU4Health y la perspectiva que observa para la formación médica en Europa
Con motivo del Día de los Médicos Europeos, Médicos y Pacientes entrevista al profesor Vassilios Papalois, máximo representante de la UEMS, para conocer su visión sobre la situación actual de los profesionales médicos, la relevancia de la acreditación de la formación médica continuada y la labor que ha desempeñado su institución en la pandemia por COVID-19
¿Por qué considera tan relevante la implementación del programa UE4Health?
El programa UE4Health tiene una característica básica que es hacer hincapié en la atención sanitaria transfronteriza. Una de las lecciones más importantes que aprendimos de la pandemia es que los países europeos deben colaborar en el cuidado de la salud para enfrentar un desafío tan grande como el COVID-19, pandemias similares u otros desafíos.
El programa EU4Health pone a la atención médica por primera vez en el centro de la colaboración transfronteriza, incluidas las áreas de capacitación, investigación y desarrollo profesional. Y esta es un área en la que, como organización, ponemos mucho énfasis, ahora trabajamos muy de cerca con los Consejos Médicos Nacionales, como el Consejo de Colegios Médicos de España, y con los Órganos Especialistas de la UEMS para poder encontrar áreas para proponer a la Comisión Europea para obtener financiación en el futuro.
¿En qué etapa se encuentra el Reglamento que establecerá los criterios del programa EU4Health?
Aún no está listo. Un programa de este tamaño siempre pasa por varias etapas de aprobación como la Comisión Europea y el Parlamento Europeo. Pero el quid de la cuestión es que, más allá de la aprobación y de la parte administrativa de la misma, existe una clara convocatoria de propuestas por parte de la Comisión Europea, y aquí es donde el mundo médico debe estar preparado, porque la financiación puede estar disponible y que en última instancia no se proponga nada creíble para el bien de los pacientes y de los médicos. En eso estamos trabajando en este momento, y nuestras propuestas se enfocarán, mayoritariamente, en una formación transversal en la formación y el desarrollo profesional de los médicos, que es lo que más importa en este sentido.
¿A dónde debería dirigirse la formación médica en Europa?
La formación médica en Europa es diferente en los distintos países, pero lo que nuestra organización ofrece ahora es la visión europea de armonizar y elevar los estándares de formación. Tenemos los requisitos de formación europeos (ETR) para casi todas las especialidades y competencias médicas, los exámenes europeos o evaluaciones; también contamos con la acreditación de centros de formación en especialidades a nivel europeo; y, por último, pero no menos importante, el Consejo Europeo de Acreditación de Formación Médica Continuada (EACCME) que acredita todos los eventos que suceden en Europa más allá del campo de la educación médica moderna especializada.
Entonces, como organización, con el apoyo de nuestras Asociaciones Médicas Nacionales y los Órganos Especialistas de la UEMS, hemos desarrollado y seguido avanzando estos proyectos que ofrecen una visión europea de la formación y el desarrollo profesional, que es muy exitosa, y es el punto de referencia con el que todos los países pueden preparar sus sistemas de formación.
¿Es la acreditación una de las piedras angulares de la medicina europea del futuro?
La EACCME tiene una historia de casi veinte años y acepta solicitudes no solo de Europa, sino de todo el mundo, para eventos internacionales de primer nivel. Los tres pilares de este son: la revisión por parte de la oficina de la UEMS / EACCME, la revisión especializada por el Organismo de la UEMS y la revisión por la Autoridad Nacional de Acreditación del país donde se realiza el evento.
Esta acreditación incluye eventos en vivo, eventos híbridos y material de aprendizaje electrónico con todos sus elementos, como módulos de aprendizaje electrónico, seminarios web, aplicaciones, bibliotecas electrónicas, etc.
Estos créditos son reconocidos en toda Europa, y también por la Asociación Médica Estadounidense y por el Real Colegio de Médicos y Cirujanos de Canadá; además, ahora estamos en proceso de establecer una colaboración con la CONFEMEL, la Confederación Médica Latinoamericana y del Caribe.
Además, hemos trabajado con varios países para otorgar créditos EACCME a eventos nacionales en el idioma local y que tienen lugar en el país específico; y España fue el primer país que lo hizo y ha tenido mucho éxito.
¿Cómo ha afectado la pandemia de COVID-19 al trabajo de los médicos en Europa?
Ha afectado enormemente, la mayoría de nosotros fuimos reubicados en diferentes funciones, tuvimos que aprender nuevas habilidades para poder lidiar con todo lo que ocurría, y todo el mundo estaba bajo una inmensa presión personal y profesional, presión física y psicológica.
Hubo un gran efecto sobre todos los médicos y todos los profesionales de la salud. La pandemia ha creado una serie de problemas: el primero es que tenemos una gran acumulación de casos que deben tratarse: casos de diagnóstico, operaciones programadas, etc., y cada sistema de salud debe encontrar la manera de solucionarlo. El segundo es que la formación se vio enormemente afectada, porque muchos de los médicos tuvieron que ser reubicados y su formación retrocedió hasta un año y medio o dos años en muchas ocasiones, lo que supone otro gran desafío. Además, tenemos nuevos elementos en nuestra práctica profesional, como, por ejemplo, la telemedicina, que es algo a lo que nos debemos adaptar en el futuro.
Necesitamos ver cómo podemos preparar los sistemas de salud en el futuro para poder hacer frente a una pandemia similar u otros desafíos y, por lo tanto, la UEMS ha creado un Grupo de Trabajo para poder analizar cuál ha sido la experiencia paneuropea al respecto e intentar producir una serie de recomendaciones relevantes.
¿Cómo ha afectado la pandemia COVID-19 la actividad de la institución a la que representa?
Debemos adaptar dos grandes áreas: la EACCME y los exámenes. La EACCME porque la mayoría de los eventos se convirtieron de eventos en vivo a material híbrido o de e-learning, por lo que tuvimos que cambiar el proceso de revisión para incluir todo eso sin violar nuestros principios, y esto tuvo que hacerse en un período muy corto de tiempo.
El segundo gran elemento fueron las evaluaciones, porque la mayoría de ellas tuvieron que convertirse en exámenes virtuales, y nuevamente supuso un gran desafío.
¿Cuáles son los desafíos que propone la UEMS cuando termine la pandemia?
Creo que no debemos volver exactamente a lo que todos estaban haciendo antes de la pandemia, eso sería un fracaso, debemos aprender de las lecciones de esta pandemia y tratar de cambiar nuestra práctica profesional de muchas maneras. Por ejemplo, la pandemia mostró muy claramente que la especialización y la subespecialización son muy importantes, pero todos debemos tener algunas habilidades médicas generales básicas para lidiar con problemas como el desafío COVID-19.
Necesitamos encontrar nuevas formas de poder continuar durante los desafíos la actividad programada, y, al mismo tiempo, la actividad de emergencia como la pandemia; nuevas formas de adaptar la capacitación profesional durante esos desafíos y también nuevas formas de ofrecer educación médica y desarrollo profesional.
