La Dra. María Castellano, catedrática de Medicina Legal y Forense de la Universidad de Zaragoza y de Granada y referente en el ámbito de la Deontología, impartió una sesión científica en la Real Academia Nacional de Medicina, de la que es académica de Número, sobre 'La libertad sexual desde la perspectiva médico-legal', en la que habló sobre los delitos contra la libertad sexual de las personas y el "importante papel" de los profesionales sanitarios en este campo. En este sentido, expresó que "los médicos estamos obligados a detectar los abusos y las agresiones sexuales"
La profesora María Castellano, fue la primera mujer catedrática en una Facultad de Medicina en España con sólo 32 años, y pionera en el abordaje de la violencia de género en nuestro país. Además, fue la segunda mujer que ocupó el sillón de académica en la RANM y cuenta con una amplia trayectoria en las Comisiones Deontológicas de distintos Colegios de Médicos y siendo miembro de la Comisión Central de Deontología de la Organización Médica Colegial (OMC).
«Aunque no sería lo deseable oír hablar de los delitos contra la libertad sexual, se lo voy a dedicar a todas las víctimas de estos delitos, a las víctimas silenciosas, las víctimas que no alcanzan notoriedad, aquellas que pierden la vida de forma consecutiva por la perpetración del delito». Con estas palabras la Dra. María Castellano iniciaba su ponencia haciendo alusión al porqué del título de la misma.
En su intervención, desgranó el contexto que ataña a la sexualidad entendida como una «condición y expresión de la persona, una necesidad biológica que va encaminada con la procreación y la perpetuación de la especie. Que tiene que verse como con una necesidad de comunicación de expresión de emociones y de sentimiento».
En este sentido, explicó que la libertad sexual en su expresión «está ligada a la dignidad de la persona y eso significa el reconocimiento de este derecho de la persona».
Es un tema que tiene un interés medico social, según expresó la Dra. María Castellano, en la medida en la que «se han producido unos cambios a nivel social muy importantes regulados por normas jurídicas». A su juicio, «es un tema en el que debemos estar comprometidos todos como integrantes de una sociedad pero que de una forma muy particular los médicos y los profesionales sanitarios».
Para la Dra. Castellano, además, de la asistencia a las víctimas que «debe ser la adecuada» y de que todos aquellos profesionales que trabajen con menores a nivel educativo y a nivel médico tienen que presentar el certificado de carecer de antecedentes penales respecto a denuncias o delitos de tipo sexual, «a los médicos se le exige unos deberes de altísima responsabilidad en la detección de estos delitos contra la libertad y la indemnidad sexual».
En su opinión, «los médicos estamos obligados a detectar los abusos y las agresiones, a hacer una plena personalización de cada caso y a actuar con mucha prudencia pero con mucha contundencia».
Lo primero es la asistencia médica pero después hay que valorar la situación de la víctima y sus circunstancias atendiendo a estos deberes médico legales, hay que proteger a la víctima y hay que recoger todo tipo de pruebas y atendiendo a estas pruebas hacer la denuncia mediante el parte de lesiones, tal y como puntualizó la Dra. Castellano.
Asimismo, hay que tener muy presente la peritación médico legal, pero no del médico forense sino del pediatra, del médico de familia del geriatra, del psiquiatra «que sospecha o diagnostica un posible delito en este ámbito que será preciso en el reconocimiento de la víctima y en el reconocimiento del autor cuando sea posible el reconocimiento del lugar y las pruebas para, que ese caso pueda ser probado».
«Aquí cada médico en su momento tendrá un papel diferente, evidentemente no se puede romper ninguno de esos eslabones que harán posible el diagnosticar y el establecer que el delito ha sucedido», especificó la Dra. María Castellano quien añadió que tras ver «la redacción que tienen las leyes se extrae una serie de actos y de circunstancias médicas que tienen que quedar establecidas y que dependiendo de estas se va a calificar el delito con una gravedad u otra con una escena u otra».
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