Dr. Wilson Astudillo: “Esta edición del curso es más completa porque incluye el manejo de pandemias como la Covid-19 en los niños”

 

 “Creemos que con el mismo, la OMC contribuirá muy positivamente a una mejor formación paliativa de los médicos tanto especialistas como pediatras, enfermeros, psicólogos, y otros profesionales”, subraya el Dr. Wilson Astudillo, médico Neurólogo y especialista en Medicina de Familiar y Comunitaria y presidente y fundador de la Sociedad Vasca de Cuidados Paliativos.

 

Información y programa del curso en: https://www.ffomc.org/intro_Paliativos_Pediatricos2

 

 

El Primer curso de Medicina Paliativa en niños y adolescentes ha tenido una acogida muy positiva  entre los pediatras y otros sanitarios que han considerado su contenido muy actualizado y  relevante para su práctica habitual, dada la carencia formativa en esta área que lo corroboran en sus comentarios. Es de agradecer la sensibilidad mostrada por la OMC para promover una mejora de la educación paliativa de todos los profesionales implicados en su atención.

 

 

Es un curso que refleja la filosofía de la Medicina Paliativa aplicada a los niños y adolescentes para un cuidado integral multidisciplinar de los pacientes con expectativa de vida limitada o que tienen alterado su bienestar de forma crónica por la enfermedad. 

Se exponen de forma clara las diversas unidades didácticas sobre un amplio espectro de temas que se consideran indispensables y se acompañan de documentación, vídeos y bibliografía complementaria muy variada. En este nuevo curso se ponen en marcha sugerencias de los alumnos que enriquecerán esta segunda edición y existirá un resumen gráfico del contenido de los diversos módulos y nuevos casos clínicos y foros resaltándose en todo momento la necesidad de considerar al paciente y a la familia como una unidad de tratamiento.

 

 

Queremos que este curso sea aún más  completo por lo que incluirá el manejo de pandemias como la Covid-19 en los niños, que aunque es leve en su mayoría, se aprecian cada vez casos severos y el síndrome inflamatorio multisistémico pediátrico con fiebre persistente, inflamación y disfunción de uno o más órganos que requieren una intervención multidisciplinar y cuidados paliativos. Creemos que con el mismo, la OMC contribuirá muy positivamente a una mejor formación paliativa de los médicos tanto especialistas como pediatras, enfermeros, psicólogos, y otros profesionales.

 

 

Los Cuidados Paliativos han tenido una gran importancia en la pandemia para tratar de atenuar el gran sufrimiento producido por la enfermedad y el aislamiento, lo que ha contribuido a aumentar el interés de todos los profesionales por adquirir unos conocimientos más adecuados sobre la atención al final de la vida, las voluntades anticipadas y en cómo ofrecer una atención integral que contrarreste el aislamiento y mejore el bienestar y la dignidad de los enfermos y sus  familias. Existe una lista de  aproximadamente 400 códigos CIE10 de enfermedades que pueden acortar la vida de los niños en donde son y pueden ser beneficiosos los cuidados paliativos.

 

 

La Medicina Paliativa, que mejora el bienestar de los pacientes a través de reducir su sufrimiento debe aplicarse desde el mismo momento del diagnóstico de una enfermedad limitante o que pone en peligro la vida. Ha experimentado muchos avances que permiten una asistencia activa y total de las necesidades de los niños y adolescentes y de sus familias. Se orienta a la prevención y al alivio del sufrimiento en sus diversas causas, al control adecuado del dolor y de otros síntomas molestos, sea cual sea la etapa de la enfermedad y a mantener su dignidad y puede combinarse con otros tratamientos activos.

 

 

En estos últimos años se está produciendo un gran interés por el desarrollo de los cuidados paliativos pediátricos en España y son cada vez más numerosas las iniciativas a favor de ellos como  la del Hospital Trueta de Gerona para enfermos crónicos y el impulso de otros alumnos del curso para promover unidades en sus autonomías conscientes de su gran necesidad. Actualmente existen diez unidades pediátricas, 8 a domicilio y dos hospitalarias para 17 comunidades autónomas (hay 680 en toda Europa), lo que produce una atención muy deficiente de las necesidades de entre 5.000 a 7.000 niños padecen enfermedades que limitan o amenazan sus vidas. De ellos fallecen entre 930-1500 niños por estas condiciones. Solo en dos comunidades se tiene atención 24 horas al día y 7 días a la semana. Por ello creemos que es importante educar paliativamente a los médicos en general, pediatras y a todo el personal que atiende a los niños, conceptualizar y definir los modelos de atención utilizados para abordar el problema y desarrollar estrategias para regular y cubrir las necesidades de los pacientes y de sus familias. 

 

 

• Capacitar a los profesionales tanto médicos, enfermeros, psicólogos, pedagogos hospitalarios en la atención de niños y adolescentes con enfermedades que limitan o amenazan su vida, con un enfoque que tenga en cuenta todas las dimensiones de la persona, sus derechos y valores, así como las necesidades de la familia. 

 

• Resaltar que los cuidados paliativos pediátricos no solo son útiles para mejorar la calidad de vida de los pacientes oncológicos y su tolerancia a los tratamientos, sino que también se emplean cada vez más para aliviar el sufrimiento y mejorar el bienestar de aquellos niños y jóvenes con una menor expectativa de vida por enfermedades agudas, traumatismos craneales, trastornos metabólicos, genéticos, cardíacos,  etc., y otras entidades crónicas.

 

• Promover la utilización de instrumentos actualizados de comunicación y terapéuticos para prevenir y aliviar el sufrimiento, sea cual sea su enfermedad y posibilitar el bienestar del enfermo.

 

• Facilitar  la preparación y el soporte del niño y adolescente, así como a saber dar apoyo a la familia durante la enfermedad y en el duelo posterior.

 

• Promover la cooperación internacional en cuidados paliativos pediátricos como una forma de mejorar su calidad de vida, de dar vida a sus años y de ayudar a reducir la muerte prematura.