El Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM) y la Federación Latinoamericana de Sociedades Científicas de Estudiantes de Medicina (FELSOCEM) firmaron un convenio de colaboración para los próximos años
Este convenio incluye la posibilidad de que estudiantes de España puedan asistir al Congreso Científico Internacional de FELSOCEM y que estudiantes de medicina de Latinoamérica puedan inscribirse al Congreso de Educación Médica del CEEM, un evento anual organizado por una delegación de estudiantes votada en la Asamblea General del CEEM que congrega a más de 800 estudiantes durante tres días.
Uno de los puntos clave de este convenio es el proyecto de comparación de las prácticas curriculares en el grado de Medicina. En los países de Latinoamérica, el estudiante tiene un papel mucho más relevante en sus prácticas clínicas, aunque en parte, es por la falta de personal sanitario en sus hospitales. Desde el CEEM llevan años reivindicando que el papel del estudiante de Medicina en prácticas debe quedar definido para “no ser un ficus” en prácticas.
Otros de los puntos clave de este convenio es el proyecto de comparación de las salidas profesionales del grado de Medicina en España y en Latinoamérica. En España, para ejercer la Medicina es necesario ser especialista. Para acceder a la especialidad es necesario superar la Formación Sanitaria Especializada a través del examen MIR o de las oposiciones del estado del cuerpo de Forenses, de Medicina Penitenciaria o de Medicina Militar.
Otra posibilidad es trabajar en aseguradoras privadas, pero cada vez piden más la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria y Medicina del Trabajo. Cada año se presentan 15.000 opositores a la prueba MIR, para la cual suele haber 7.500 plazas. Por este motivo, 7.500 aspirantes tendrán que buscar alternativas al MIR, como preparar alguna de estas oposiciones, dedicarse a otra cosa o emigrar al extranjero, con la pérdida de valor que supone para España, el país que le ha formado.
“La crisis sanitaria ha sacudido todos los estamentos de la sociedad, estamos en un momento óptimo para analizar qué aspectos no funcionan por pertenecer a un sistema obsoleto y buscar otras opciones. Esta situación puede ser una oportunidad para ver alternativas al modelo universitario actual y hacer propuestas más adecuadas a una nueva normalidad en la que las y los estudiantes de Medicina tengamos un papel más activo en nuestra formación.” declara Antonio Pujol de Castro, presidente de CEEM.
